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En todo el mundo, las empresas y los
proveedores de almacenamiento están luchando por encontrar soluciones creativas
que les ayuden a superar la falta de espacio para resguardar cada vez más
mercancía, a medida que las redes de la cadena de suministro siguen adaptándose
a las expectativas de inmediatez y el incremento de la demanda del comercio
electrónico.
Para complementar el mercado tradicional
de almacenes, que dispone de edificios, normalmente alejados de la mancha
urbana que funcionan como grandes bodegas y centros de distribución, los
proveedores de este servicio están diseñando nuevas estrategias, que implican
desde el uso de remolques temporales hasta el alquiler temporal al estilo de
AirBnb.
Por su capacidad de unir las necesidades
del inventario con los espacios de almacén, cada vez son más las empresas que
están alquilando cajas secas como espacio de almacenamiento temporal.
Si bien, esta medida no es nueva, pues en
el pasado ha sido recurrida por gerentes apresurados por satisfacer y adaptarse
a los picos de inventario, los remolques temporales viven un nuevo auge,
gracias a que pueden usarse de forma segura incluso durante años, y permiten
escalar el espacio de almacenamiento de acuerdo con la demanda.
De hecho, algunos inventarios se abastecen bajo la
perspectiva de que deben ser móviles, por lo que en estos casos se opta por
guardar la mercancía en las cajas secas que simplemente son trasladadas hasta
donde su contenido se requiere, una vez que surge esta necesidad.
Por su eficiencia, practicidad y bajo
costo comparado con otras alternativas, el almacenamiento temporal o bajo
demanda móvil se está convirtiendo en un elemento clave de las estrategias de
almacenamiento a largo plazo para el comercio electrónico, un sector que a raíz
de la emergencia sanitaria desatada por la pandemia mundial de COVID-19 ha
multiplicado enormemente su demanda, sumando millones de nuevos compradores que
anteriormente se rehusaban a las compras digitales, pero para quienes ahora,
este esquema representa una mayor seguridad, comodidad y accesibilidad, ante
las restricciones de movilidad que piden permanecer en casa el mayor tiempo
posible, hasta que se logre mitigar el brote de la enfermedad.
Esto, porque además de adaptarse
rápidamente a las nuevas necesidades de sus respectivas cadenas de suministro,
respaldándolas en el cumplimiento de los tiempos de entrega, permite a las
empresas ahorrar dinero de cross dock, ya que basta con tener un espacio donde
estacionar el remolque para conservar en buenas condiciones la mercancía,
economizando así los costos de una bodega.
Como vemos, pensar en los remolques más en
términos de bienes raíces, en lugar de verlos como simples cajas secas,
representa una enorme oportunidad para que las empresas exploren diferentes
soluciones de almacenamiento y logística, antes de comprometer su capital en
uno o varios contratos de arrendamiento de almacén a largo plazo, que además de
ser costosos, son difíciles de conseguir actualmente.
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